Me gusta esta soledad sola.
En silencio.
En mi campo.
En mi mundo.
Pero es tan agradable cuando esa soledad se rompe momentáneamente, se quiebra, es compartida.
Visitas.
Casa abierta a los amigos.
A los recién conocidos que ya se instalan en el corazón (y ojalá para quedarse)
A los alumnos que poco a poco se van transformando en actores propios y amigos también.
A esas otras soledades que también comparten sus momentos y se abren a las charlas.
A esos huecos de afecto a los que mansamente, me voy asomando.
Lindos momentos.
Lindas charlas.
Lindos proyectos.
Lindas ideas.
Lindos afectos.
Lindos amores.
Sigo celebrando tanto cambio!...
No hay comentarios:
Publicar un comentario