Deseo desde el corazón

Deseo desde el corazón... Que nunca les falte un sueño por el que luchar, un proyecto que realizar, algo que aprender, un lugar donde ir y alguien a quien querer.
Y recuerden: lo imposible solo tarda un poco más...

miércoles, 27 de enero de 2010

Yo, según otros.

Hace un tiempo más o menos largo, alguien con quien no tenemos un vínculo demasiado cercano, me dijo que había soñado conmigo.
Me había soñado desnuda.

Y automáticamente, mi cabeza empezó a maquinar el cómo sería la imagen que tiene alguien que no me conoce demasiado, de mi cuerpo desnudo.
Y pensaba en qué tan cercana o lejana de la realidad sería esa imagen mía que a él se le presentó en el sueño.
Cómo me vería.
Cómo sería yo para él.

Y ese pequeño suceso fue el disparador para hacerme incansablemente esa misma pregunta: "¿cómo me ve el otro?"
Y entonces digo…

Cómo me verá mi madre a mis cuarenta y tantos después de haberme criado y haber fantaseado mil destinos para mí.
Cómo me verán mis niños alumnos cuando entro a su aula por primera vez.
Cómo será la imagen que reciben a través de sus ojitos curiosos mis perritos. Cómo me verán cuando los acaricio y cómo cuando los reto.
(Cómo la recién salvada de la ruta que le traigo comida pero le ordeno un "NO" para que no entre a mi casa, o Bandido, que lo acaricio o lo empujo para que no me salte. Sí, si lo escribo es también para expiar la culpa que me produce el hacerlo).
Cómo me verá el que me ve pasar en bicicleta.
Cómo seré cuando viajo en tren o cuando espero un colectivo.
Cómo me veré sobre el escenario.
Cómo cuando miro algo emocionada y cómo cuando trato de seducir.
Cómo me verán mis amigos.
Ese es un dato que me interesa.

El reflejo.
Qué reflejo.

Empecé hablando del cuerpo y ahora me desvié a la esencia.
Y qué tan cercana o lejana será la similitud entre quienes me ven y el como yo me siento.

Mi percepción y la de los otros.
¿Y la de ellos será tan fluctuante como la mía?
Un día espléndida, otro terrible, otro gorda, otro maravillosa…

Cavilaciones.
Cavilaciones.
A menos que alguien me lea y me responda, no aparecerá la respuesta.
No puedo verme más que por mis propios anteojos.

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